Antecedentes

Es fundamental reconocer la importancia del acceso a la justicia como pilar del Estado de Derecho y su vinculación con los derechos de las niñas, los niños, los adolescentes (NNA) y jóvenes. La consulta resalta la necesidad de informar y empoderar a NNA y jóvenes sobre sus derechos fundamentales.

La Convención sobre los Derechos del Niño, un tratado internacional clave, junto con las leyes nacionales de protección a la infancia, proporcionan el marco normativo para estas cuestiones. Estas normas no solo reconocen la importancia de proteger los derechos de NNA, sino que también subrayan la necesidad de su participación activa y consciente en la sociedad, incluyendo su derecho a ser escuchados en asuntos que les afectan directamente. En este sentido, la consulta es un espacio para que las niñeces expresen sus opiniones y preocupaciones, lo cual está en plena consonancia con los principios de justicia y derechos humanos fundamentales.

Informe Final (pdf)

¿Por qué consultarles a los niños, niñas, jóvenes y adolescentes sobre sus derechos?

La consulta a niños, niñas, jóvenes y adolescentes sobre sus derechos se fundamenta en la convicción de que sus voces y perspectivas son esenciales para la creación de políticas y prácticas que afectan directamente sus vidas. Esta práctica se origina en el reconocimiento internacional, principalmente a través de la Convención sobre los Derechos del Niño, de que las y los menores no solo son sujetos de protección, sino también actores sociales con derecho a participar en decisiones que les conciernen.

Al consultarles, se promueve su desarrollo como ciudadanas y ciudadanos informados y comprometidos, se fomenta el respeto por sus opiniones y se contribuye a su empoderamiento. Este enfoque se alinea con la tendencia global hacia una mayor inclusión de sus voces en los procesos de toma de decisiones, reconociendo que su bienestar y sus derechos son fundamentales para el desarrollo sostenible y justo de cualquier sociedad.

Además, la participación activa de NNA y jóvenes en estas consultas les brinda la oportunidad de aprender y cuestionarse sobre sus derechos y responsabilidades, aumentando su conciencia y capacidad para abogar por sí y por otros. En este sentido, la consulta no solo es un ejercicio de cumplimiento normativo, sino también una herramienta educativa y de fortalecimiento de la democracia.

El contexto actual, donde los derechos de las niñeces a menudo se ven desafiados o ignorados, hace que estas consultas sean aún más cruciales. Proporcionan un espacio seguro para que expresen sus preocupaciones, deseos y necesidades, lo cual es esencial para construir sociedades que respeten y valoren a todos sus miembros, independientemente de su edad.

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