Reinsertarse a través del libro y la cultura es el objetivo que promoverá la nueva biblioteca destinada a los internos de la “calle 5” del Centro de Detención Preventiva Santiago Sur (ex Penitenciaría), espacio que fue inaugurado esta mañana por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, y la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés.

En la actividad, los secretarios de Estado compartieron con parte de los usuarios y administradores del recinto, todos parte de la población penal, con quienes abordaron las expectativas y sueños que les abre esta instalación bibliográfica.

En la oportunidad, junto a los ministros, también estuvo presente el director nacional de Gendarmería, coronel Christian Alveal; el subdirector del Sistema Nacional de Bibliotecas Públicas, Gonzalo Oyarzún, y el astrólogo Pedro Engel, quien es autor de uno los libros más requeridos por los internos.

“El gobierno y quienes estamos comprometidos con esta situación, pensamos que lo más importante es trabajar en la reinserción, y definir fórmulas para que los privados de libertad ocupen su tiempo para prepararse para volver a tener una vida normal una vez egresados del sistema penitenciario”, sostuvo el ministro Larraín, quien agregó que “nosotros consideramos clave la experiencia cultural, porque hace que las personas se sientan distintas, que aprendan a mirar la vida a través de otros ojos, mediante la lectura. Un libro es aventurarse a vidas distintas”, destacó el titular de Justicia y Derechos Humanos.

Por su parte, la ministra Consuelo Valdés agradeció la disposición de Gendarmería a autorizar y apoyar la puesta en marcha de este recinto, porque, a su juicio, leer un libro es el primer paso a la igualdad de oportunidades. “La idea es que existan en este país igualdad de oportunidades para todas las personas, chilenas y chilenos, independiente de su condición, de su lugar, de su edad, para que tengan acceso a la lectura, al libro, porque la lectura nos hace mejores personas y eso es muy importante, ya que nos abre el pensamiento y el conocimiento”, señaló.

Esta iniciativa se enmarca en la implementación del “Plan de Bibliotecas en Recintos Penitenciarios” del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural logrando, a la fecha, 61 bibliotecas en recintos penitenciarios. Durante el 2018 se abrieron 18 espacios y se registraron 4.317 nuevos usuarios, realizándose 27.390 préstamos de libros, además de 4 mil capacitaciones de alfabetización digital, ya que además de libros, los usuarios acceden a computadores conectados a internet.

Dentro de las obras más requeridas por los internos, están “Fuego en la cárcel de San Miguel” de Diego González; “La historia del rock: la guía definitiva del rock, el punk, el metal y otros estilos” de Mark Peytre; una novela gráfica inspirada en “El diario de Ana Frank”; “Sueños: diez claves para interpretarlos” de Pedro Engel e “Historia secreta de Chile 2” de Jorge Baradit.