Se han ejecutado 18 iniciativas en 16 residencias a lo largo de la región.

El Sename en la Región de Los Lagos ha invertido más de 98 millones de pesos en el financiamiento de los llamados “Proyectos de Emergencia COVID-19″. Esto comprende la ejecución de 18 iniciativas de distinta índole en las 16 residencias que pertenecen a la red de protección en esta región. 

En algunos casos, el financiamiento se usó para generar infraestructura y así generar espacios segregados que permitan atender a niñas y niños con sospecha o confirmados de contagio por Coronavirus. Uno de estos proyectos de infraestructura es el de la residencia San Arnoldo, perteneciente a Fundación Verbo Divino en Puerto Varas, quienes construyeron un espacio dormitorio con capacidad para dos niñas o niños y un lactante, habilitado con aire acondicionado, servicios higiénicos propios, acceso directo desde el exterior en caso de requerir la salida o ingreso y así evitar el tránsito por espacios comunes de la residencia. Un proyecto de alto estándar de habitabilidad, por un costo de 7,6 millones de pesos y que contó también con el aporte de recursos privados para el equipamiento interior.

Los proyectos de emergencia COVID-19 de Sename, han financiado hasta el momento 18 iniciativas en la totalidad de las 16 residencias que existen en la región.  Al respecto, el seremi de Justicia y Derechos Humanos, Alex Meeder, señaló que “esta es una realidad que hemos podido apreciar no solamente aquí en Puerto Varas, sino que también en la ciudad de Osorno, y por lo tanto se están utilizando correctamente los fondos que se destinaron para crear estas salas de cuidado”.

La directora regional de Sename, Lilian Peña, señaló que “a raíz de la pandemia del COVID-19, el Servicio Nacional de Menores entregó recursos a todas las residencias del país para apoyar el trabajo que implicaba la protección de los niños ante un posible contagio y cada organismo decidió destinar estos recursos a contratación de personas, compra de insumos y en el caso de Verbo Divino, decidió focalizarlos en la habilitación y construcción de salas de aislamiento, que además han sido habilitadas con un alto estándar, por lo tanto, es una tremenda ganancia para el proyecto y para los niños que están acá”.

Entre tanto, la directora de la residencia de lactantes San Arnoldo, Marjory Cancino, cuyo proyecto fue inspeccionado por la autoridad, indicó que “esta sala de aislamiento fue construida con los fondos que nos entregó Sename como fondo de proyecto de emergencia para el COVID-19, y el objetivo de esta sala, en el caso de que hubiera un contagio de un niño, poder aislarlo en este lugar y de esta forma evitar el impacto de que se pueda propagar el virus dentro de la residencia. Estamos listos entonces, para poder funcionar ante cualquier emergencia, que esperemos no ocurra aquí en la residencia”.