El sector Justicia y DD.HH. de Valparaíso se prepara para llevar adelante el encuentro “Buenas prácticas con enfoque de género”, que se programó para el martes 24 de noviembre.

A partir de las 09:30 horas de ese día, representantes de los servicios expondrán cómo se aplica la perspectiva de género en la medicina legal, en la defensa penal pública y en el trabajo con mujeres privadas de libertad.

La actividad se realizará vía zoom.

Este encuentro de buenas prácticas, que se llevará a cabo a fines de noviembre, se sumará a la reciente jornada de transferencia técnica “El Estado y los compromisos de Género: dimensiones estructurales, abordaje de la respuesta jurídica, una necesaria revisión”, destinada especialmente a abogados de la red Sename, y organizada por el consejo de funcionarias de Sename Valparaíso, junto con la Secretaría Regional Ministerial de la Mujer y la Equidad de Género.

En la ocasión participaron más de 50 personas y contó en primer lugar con la exposición de Claudia Encalada, profesional de la Seremi de la Mujer, quien presentó sobre el contexto internacional, la desigualdad de género, la posición ético-política para el abordaje de las desigualdades y discriminaciones de género y, finalmente, los nudos estructurales y su reconocimiento para la actuación y transformación.

Seguidamente, la seremi de la Mujer y la Equidad de Género, Valentina Stagno, abordó la respuesta del sistema a la violencia por razones de género, la legislación vigente y la teoría legal con enfoque de género, la violencia de género en contexto de aislamiento; y, para terminar, mediación y violencia intrafamiliar, enfocado en la revictimización, el continuo de violencia y la desigualdad.

Pablo Toro, abogado de las Residencias Familiares, valoró la instancia destacando que “es una responsabilidad profesional estar siempre actualizando los conocimientos por el dinamismo de la sociedad y sus complejidades.  Desde la perspectiva de género en particular, vemos que, si bien en algunos aspectos, se ha avanzado hacia una mirada más integradora, el desafío es grande, y requiere de un compromiso integral para modificar las construcciones sociales y culturales que refuerzan los modelos estereotipados y discriminatorios”.