Como una excelente noticia para todos nuestros niños, calificó el Seremi de Justicia y Derechos Humanos, Fabián Mella Olivos, la promulgación el pasado jueves de la Ley de Imprescriptibilidad de delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes, en una ceremonia encabezada por el Presidente Sebastián Piñera y el Ministro del ramo, Hernán Larraín.

El personero subrayó que la promulgación de esta ley pone de relieve una vez más a los niños, niñas y adolescentes como prioridad, “los cuales merecen protección. Es por ello que la nueva norma evitará que el paso del tiempo favorezca la impunidad, por cuanto el actual estatuto de prescripción es insuficiente para garantizar un oportuno acceso a la justicia a las víctimas de estos delitos”.

Por otro lado, indicó que la Imprescriptibilidad no sólo permite perseguir a los responsables sino además interponer acciones civiles, tanto en contra de los mismos autores o responsables de estos delitos, como también en contra de aquellos que no han impedido el delito pudiendo haberlo hecho -terceros civilmente responsables-.

El sentido profundo de esta ley fue resumido al momento de su promulgación por el Presidente de la República, Sebastián Piñera, al señalar que “si las huellas, las cicatrices y el dolor de los delitos cometidos contra niños abusados sexualmente no prescriben, no se borran, tampoco se debe borrar ni mucho menos prescribir la responsabilidad penal de los abusadores”

Por su parte, el titular de Justicia y Derechos Humanos, Hernán Larraín, valoró este avance como un paso histórico, junto con agradecer el aporte transversal de los congresistas que participaron de la iniciativa: “en un año hemos sacado una ley que quizás nadie soñó con que esto iba a ser real, 9 ó 10 años de proyectos dando vueltas y nadie se había hecho cargo de esta realidad. Pero el compromiso del gobierno, del Presidente con la niñez nos llevó a darle a esta iniciativa toda la prioridad, ponerle urgencia y trabajar con aquellos que han sido víctimas de los abusos sexuales cuando eran niños, con los parlamentarios que han estado trabajando de antes esta idea y que todavía no habían logrado ponerla realmente sobre la mesa”.

A la fecha, la ley establecía que la prescripción se aplicaba en un plazo de cinco a 10 años después de que la víctima cumplía la mayoría de edad, y desde hoy los agresores que cometan abusos contra menores podrán ser perseguidos penalmente sin importar el paso del tiempo.