Esta actividad fue organizada conjuntamente por la Defensoría Penal Pública, Gendarmería de Chile, Casa de la Diversidad y la Clínica Jurídica de la Universidad Católica del Norte.

El desafío de la salud mental de los privados de libertad fue uno de los principales temas que se desarrollaron durante el seminario “Derechos Humanos en la Función de Gendarmería”, que se efectuó en la Universidad Católica de Norte (UCN).

En la actividad, que fue organizada conjuntamente por la Defensoría Penal Pública, Gendarmería de Chile, la Casa de la Diversidad de la Municipalidad de Antofagasta y la Clínica Jurídica de la UCN, expusieron diversos profesionales sobre temáticas relacionadas al quehacer intramuros para capacitar a los monitores de Derechos Humanos y profesionales de las áreas técnicas de Gendarmería.

Al respecto, el seremi de Justicia y Derechos Humanos, Juan Enrique Jara destacó la capacitación que recibieron los funcionarios de Gendarmería y señaló que “tratar la temática de Derechos Humanos es fundamental debido a la importante labor que realiza esta institución directamente con personas que están privadas de libertad. Es necesario trabajar en conjunto y este es un ejemplo claro de cómo trabajamos como Gobierno para el respeto y promoción de los Derechos Humanos de todos”.

Derechos Humanos, Migración, Diversidad Sexual y Nuevas Masculinidades fueron algunas de las temáticas tratadas durante las dos jornadas que duró el seminario. En este contexto, uno de los aspectos que más debate despertó fue la exposición de “Psiquiatría Forense en el contexto de privación de libertad”, a cargo del profesional de la unidad de Gestión de Salud Mental del Servicio de Salud Antofagasta, Cristóbal Cárcamo Santis quien junto con explicar a los presentes sobre las líneas de trabajo que se desarrollan con personas que se encuentran recluidas en centros penales, definió las modalidades de intervención que son aplicables en casos de enfermedades mentales.

“Sabemos que la situación de las personas que se encuentran privadas de libertad es compleja y que cada persona tiene disposición a desarrollar o no una enfermedad mental pero lo fundamental es saber distinguir los síntomas y derivar adecuadamente aquellos casos que requieren atención, tanto por su seguridad como por la de las demás personas”, sostuvo Cristóbal Cárcamo.

“Para la Defensoría Penal, al igual que para las instituciones que trabajan con personas privadas de libertad, el tema de las salud mental, tanto de adultos como de adolescentes, constituye un gran desafío que debe ser atendido en red, es decir, desarrollando los protocolos adecuados con la participación de todos para que las atenciones sean las propicias y en los tiempos necesarios”; sostuvo la Defensora Regional Loreto Flores al ser consultada sobre el tema.

Durante el seminario se definieron por los participantes las principales necesidades que se deben resolver en torno a la atención de personas con enfermedades mentales, las cuales serán derivadas a una mesa de trabajo que se coordinará con los actores relevantes como el Servicio de Salud, Defensoría y Gendarmería, entre otros.

“Tenemos un gran trabajo que realizar y este tipo de instancias, en que varias instituciones se unen para capacitar a los gendarmes en Derechos Humanos, es un gran ejemplo de complementariedad y trabajo en equipo. De igual forma debemos seguir avanzando en la concreción de los desafíos compartidos”, finalizó la Defensora.